Sigue sembrando conmigo
que lo que siembre tu mano
si es amor, cariño o trigo,
lo recogeras hermano.

Piensa siempre, siempre piensa
y no dejes de pensar
veras como tu conciencia
puede un error enmendar.

No es cuando nadie me diga,
no es cuando algunos lo quieren.
será cuando yo decida
porque en verdad me conviene.

Yo no confío en la gente,
que a veces de mala gana
me sonrie indiferente
y no me mira a la cara.

Hay quién cuida en esta vida
solamente la apariencia,
y lo más bello descuida
que es la paz de su conciencia.

Y es que pensándolo bien,
voy a dejar de pensarlo
porque no me hace bien
tanto dolor recordarlo.

No hagas cosas y las niegues,
si alguién con sus ojos vio.
Ante el hombre negar puedes,
no ante los ojos de Dios.

No me gustan los que empujan
por detrás para tumbarme.
No me temas por ser bruja,
excepto si me empujaste.

Siempre el malo pagará
de una manera o de otra.
La vida se encargará
de brindarle su derrota.

Yo no me juego en la vida,
jamás, la ultima carta.
Siempre tengo una escondida,
por si acaso, me hace falta.