¡ALEGRIA!
Cantando todas mis dichas,
alegrías, sinsabores.
Me olvido de las desdichas,
que me ocasionan dolores.
Versando con entusiasmo,
a lo cierto y a lo incierto,
yo hube formando un fandango,
que terminara en concierto.
Bailando con alegría,
recibo con voluntad,
lo que traiga un nuevo día,
con toda serenidad.
Y de mañana temprano,
siempre le agradezco a Dios,
que me obsequie cual regalo,
su bendita protección.